Políticas activas de empleo en Extremadura

Se propone sistematizar, homogeneizar y depurar las bases de datos existentes, centralizando los microdatos de los beneficiarios y solicitantes de los distintos programas del SEXPE en un sistema integrado global y conectándolos con los datos de demandantes de empleo y con la información que la Junta de Extremadura dispone de ellos procedente de la Seguridad Social. La información disponible en esta base de datos debería tener un formato homogéneo que permita su explotación y contener datos de calidad para garantizar que el análisis que se efectúe sea riguroso.

Con el fin de asegurar un enfoque individualizado y personalizado, que tenga en consideración las características y peculiaridades de cada demandante de empleo, se recomienda desarrollar un sistema de indicadores que permita identificar a las personas con menor probabilidad de encontrar un empleo. Estos indicadores se podrían construir a partir de las bases de datos disponibles y deberían contener, para cada individuo, toda la información de carácter sociodemográfico, económico, de nivel de formación, vidas laborales, así como toda la información relacionada con el ámbito laboral en poder de las administraciones públicas.

A partir del sistema de indicadores anteriormente descrito, focalizar las PAE según el grado de empleabilidad de las personas, de forma que se pueda aumentar la eficacia y la eficiencia de las actuaciones sobre las personas de baja empleabilidad y reducir la presencia de peso muerto en determinados programas (empleo que se hubiera creado de igual forma sin el apoyo público). Además, con estos indicadores se podría efectuar un seguimiento sencillo y continuo del grado de empleabilidad de los individuos a lo largo del ciclo económico y plantear distintas actuaciones sobre las personas desempleadas para promover su inserción.

Potenciar la evaluación de eficacia e impacto de los programas y servicios del SEXPE en línea con las actuaciones que el Observatorio de Empleo del SEXPE tiene encomendadas y con el compromiso con la evaluación recogido en la nueva ley de empleo. Reforzar para ello los medios técnicos e informáticos e incorporar perfiles analíticos.

Se propone continuar potenciando, dentro del ámbito de las competencias de Extremadura, una formación profesional de calidad, muy específica y supeditada a las necesidades del mercado laboral extremeño y en particular a su tejido empresarial. En línea con la nueva ley de Formación Profesional y con el impulso que se está dando desde la comunidad autónoma a la vinculación entre la Formación Profesional y el empleo, habría que seguir fomentando la formación dual y la orientación profesional.

Se propone continuar potenciando, dentro del ámbito de las competencias de Extremadura, una formación profesional de calidad, muy específica y supeditada a las necesidades del mercado laboral extremeño y en particular a su tejido empresarial. En línea con la nueva ley de Formación Profesional y con el impulso que se está dando desde la comunidad autónoma a la vinculación entre la Formación Profesional y el empleo, habría que seguir fomentando la formación dual y la orientación profesional.

Con el fin de aumentar los efectos del programa a medio-largo plazo sería recomendable vincular la ayuda a programas de formación dentro de la empresa que mejoren y adapten la cualificación del trabajador a las necesidades específicas de cada negocio.

Las subvenciones se dirigen a toda la población y entre los beneficiarios predominan personas con buena empleabilidad, por lo que se propone replantear el diseño de la ayuda de manera que el incentivo económico se dirija exclusivamente a la contratación de las personas de baja empleabilidad y sea modulable en función del grado de empleabilidad de las personas beneficiarias. En concreto, se podría diseñar un incentivo económico basado en el conjunto de características personales de los beneficiarios, incrementando la subvención cuantas más dificultades en términos de empleabilidad presente la persona objeto de contratación. Permitir una mayor modulación de las ayudas según el conjunto de características personales y no de una sola (pertenecer o no a un colectivo prioritario), facilitaría, por una parte, acercar la ayuda a las condiciones particulares y al grado de empleabilidad de cada beneficiario, por ejemplo, aumentando la cuantía para una mujer de 52 años o más frente a otra mujer de menor edad si esta tiene mayor empleabilidad. Por otra parte, la mayor modulación podría resultar en un mayor incentivo a participar en el programa para los colectivos sobre los cuales el impacto es mayor.

Se recomienda analizar las vidas laborales de los potenciales beneficiarios del programa para tratar de reducir el probable peso muerto de la ayuda, para evitar contrataciones de individuos que se habrían producido de igual forma en ausencia de la subvención.

No hay propuesta asociada.

Realizar una evaluación ex post del programa que identifique las debilidades y necesidades que los beneficiarios tienen a lo largo de la vida del negocio para garantizar una mayor supervivencia a medio-largo plazo.

Reforzar la focalización del programa en individuos específicos de muy baja empleabilidad mediante la construcción de indicadores del grado de empleabilidad individual de los demandantes de empleo. No permitir el acceso al programa a personas de elevada empleabilidad, que podrían encontrar empleo con la ayuda de otras intervenciones públicas.

Replantear el diseño de la ayuda de manera que el incentivo económico sea diferencialmente más atractivo para las personas de muy baja empleabilidad. El efecto del programa no es homogéneo, teniendo un mayor impacto sobre los colectivos de baja empleabilidad, sin embargo, no se llega a ellos de forma mayoritaria, lo que reduce su efectividad, por ello se propone replantear el diseño de la ayuda. En concreto, se podría diseñar un incentivo económico basado en el conjunto de características personales, incrementando la subvención cuantas más dificultades en términos de empleabilidad presente la persona objeto de contratación.

Este programa está vinculado a programas de emprendimiento, de formación y de acompañamiento por parte de la Junta de Extremadura, sin embargo, sería aconsejable incrementar y personalizar este tipo de actuaciones durante el programa y tras su finalización buscando un aumento del número de beneficiarios que superan la barrera de los dos años de alta en el RETA, del mismo modo que una aminoración de la caída en la tasa de autoempleo de los beneficiarios, lo que supondría potencialmente una mejora de la inserción. En particular, sería recomendable intensificar y personalizar esta ayuda con medidas que incidan en la mejora de la supervivencia de la empresa, como la formación sobre las necesidades de arranque y puesta en marcha del negocio o el asesoramiento personalizado en diferentes momentos de tiempo tras la finalización del programa. En línea con otras propuestas realizadas en materia de incentivos al autoempleo, una forma de mejorar la tasa de supervivencia, no solo durante los dos años exigidos por el programa, sino incluso más allá, sería incidir en el asesoramiento y la formación de los trabajadores por cuenta propia.

Este programa está vinculado a programas de emprendimiento, de formación y de acompañamiento por parte de la Junta de Extremadura, sin embargo, sería aconsejable incrementar y personalizar este tipo de actuaciones durante el programa y tras su finalización buscando un aumento del número de beneficiarios que superan la barrera de los dos años de alta en el RETA, del mismo modo que una aminoración de la caída en la tasa de autoempleo de los beneficiarios, lo que supondría potencialmente una mejora de la inserción. En particular, sería recomendable intensificar y personalizar esta ayuda con medidas que incidan en la mejora de la supervivencia de la empresa, como la formación sobre las necesidades de arranque y puesta en marcha del negocio o el asesoramiento personalizado en diferentes momentos de tiempo tras la finalización del programa. En línea con otras propuestas realizadas en materia de incentivos al autoempleo, una forma de mejorar la tasa de supervivencia, no solo durante los dos años exigidos por el programa, sino incluso más allá, sería incidir en el asesoramiento y la formación de los trabajadores por cuenta propia.

Reformular completamente el programa dado que no alcanza su objetivo principal, que es ofrecer a los participantes una experiencia profesional que favorezca su inserción laboral y mejore su empleabilidad.

En esta reformulación se propone incidir más en la orientación y acompañamiento a los beneficiarios una vez que el programa finaliza y adicionalmente en la selección por la entidad local de ocupaciones que permitan desarrollar habilidades transferibles o que estén demandadas por el mercado para que los beneficiarios puedan insertarse en él tras la finalización del programa. Adicionalmente el programa podría vincularse a actividades formativas en las áreas específicas en las que los beneficiarios están empleados para mejorar los efectos de medio-largo plazo del programa.

Deberían revisarse los criterios de acceso al programa y garantizar que no se contrata a personas que estén muy alejadas del colectivo objetivo principal del programa. Así, aunque el programa prioriza la contratación de personas demandantes de primer empleo, casi el 70 % de personas participantes tienen 30 años o más y en muchas ocasiones una experiencia demostrada.

Se debería eliminar la posibilidad de repetir en el programa 24 meses después de la contratación anterior. En la práctica, se observa un porcentaje elevado de personas repetidoras en el programa, lo cual implica una precarización de los participantes mediante el encadenamiento de contratos de tipo temporal en las entidades locales. Además, esto va en contra del objetivo principal de Empleo Experiencia, fomentar la contratación de personas sin experiencia.

No hay propuestas asociadas.

Reformulación completa del programa evaluado en el periodo 2016-2019, dado que no alcanza su objetivo principal, que es mejorar las posibilidades de inserción laboral y la cualificación profesional de las personas desempleadas. El programa ya ha sido reformulado con posterioridad al periodo evaluado a uno nuevo “Escuelas Profesionales duales” del cual aún no se han analizado sus resultados al ser de nueva creación.

Adaptar mejor el itinerario según el área geográfica dado que las necesidades del mercado de trabajo pueden ser diferentes en cada zona. Aunque se menciona el criterio territorial en las nuevas convocatorias, no queda claro el nivel de flexibilidad del programa a la realidad del territorio.

En base a la información cualitativa obtenida se recomienda identificar la disposición real hacia el empleo de los posibles beneficiarios. Por ejemplo, mediante el desarrollo, por parte del participante, de un plan de expectativas de empleo en el que tenga que detallar sus perspectivas profesionales y la utilidad que supone la formación para la consecución de sus objetivos.

Se propone potenciar el seguimiento y tutorización de los participantes cuando finalicen el programa asociándoles un itinerario laboral.

Mejorar el proceso de selección de los formadores, reforzando la especialización en las necesidades formativas de cada municipio. Los listados de expertos para seleccionar a los formadores no suelen incluir expertos que estén familiarizados para trabajar con este tipo de colectivos ni para proporcionar formación sobre las necesidades específicas de cada municipio. Además, estos listados no suelen renovarse con la suficiente frecuencia para incorporar nuevos profesionales y al ser reducidos no suelen tener en cuenta la evaluación de su desempeño.

La formación complementaria debería enfocarse de una manera transversal a lo largo de toda la oferta formativa, así como, incrementar los elementos de inserción y orientación del programa. En la actualidad se recurre a expertos en temáticas específicas que desarrollan una formación breve que los participantes no pueden aplicar a su trabajo cotidiano ni tienen las claves de cómo hacerlo.

El programa podría establecer mecanismos para mejorar la selección de los formadores. Dadas las características particulares de la población a la que va dirigida el programa, sería recomendable que se mejorase la selección de los formadores, con el fin de que comprendan las distintas realidades de los participantes del programa (muy heterogéneos entre sí), y su disposición real a trabajar, buscando mitigar su abandono.

No hay propuestas asociadas.

No hay propuestas asociadas.

Adaptar la duración de la formación y la distribución entre la formación teórica y práctica según el tipo de formación impartida para garantizar el cumplimiento de los objetivos. La duración de la formación podría extenderse para garantizar el cumplimiento de los objetivos y mejorar las tasas de inserción. Uno de los aspectos peor valorados en el análisis cualitativo es la duración de la formación, seis meses, que en ocasiones se prevé corta para satisfacer los objetivos e impartir no solo la formación básica sino la complementaria. También sería recomendable adaptar la distribución temporal de la formación teórica y práctica, con el fin de garantizar que se asienta el conocimiento obtenido y se puede aplicar en la etapa de prácticas.

Se recomienda evaluar los efectos positivos de la capacidad tractora del programa para transformar el modelo productivo hacia las actividades innovadoras y estratégicas perseguidas en relación con el coste soportado por el programa. En particular, dado su elevado coste, sería conveniente conocer si el programa tiene efectos dinamizadores por sí solo o si sus efectos pudieran ser mayores en combinación con acciones dirigidas a promover empresas emprendedoras y startups.

Se propone mejorar la selección de las empresas destinarias, buscando aquellas que puedan tener una mayor capacidad dinamizadora en la economía extremeña y que aprovechen el potencial de los beneficiarios.

El programa podría establecer mecanismos para garantizar una mayor presencia de participantes de formación profesional, más próxima a la realidad extremeña y que requieren mayores necesidades de inserción que los universitarios, que son casi el 90 % de los beneficiarios.

Se podría requerir al participante, antes de recibir la formación, la elaboración de un plan de expectativas de empleo que determine la voluntad de incorporarse al mercado de trabajo después de la formación.

El programa podría incluir incentivos para garantizar la continuidad de los participantes en las empresas donde han realizado las prácticas laborales. Se podrían contemplar fórmulas como incluir compromisos de contratación para los participantes que realizan prácticas, ayudas directas o mayor puntuación para aquellas entidades que proponen un compromiso en este aspecto y/o que lo hayan cumplido en convocatorias anteriores.

Impartir una formación menos generalista y priorizar acciones formativas relacionadas con las necesidades demandadas en el territorio de la persona participante. Potenciar el componente de orientación e inserción de los programas.

Reforzar la focalización en individuos específicos de muy baja empleabilidad mediante el conjunto de indicadores del grado de empleabilidad individual.

Reforzar la focalización en individuos específicos de muy baja empleabilidad mediante el conjunto de indicadores del grado de empleabilidad individual.

No hay propuestas asociadas.

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