El instrumento público de reafianzamiento se concentra en microempresas (82 % del total), localizadas en Castilla y León (16 %), Andalucía (14 %) y País Vasco, Comunidad de Madrid y Galicia (11 % cada una de ellas) de los sectores comercio al por mayor y al por menor (22 %), seguido de agricultura, ganadería y silvicultura (18 %), industria manufacturera y hostelería (11 % respectivamente).
Por tamaño, las pequeñas empresas son las que mayor diferencia positiva presentan entre su proporción como receptoras del instrumento de reafianzamiento y su peso en el tejido productivo nacional. Por el contrario, en las microempresas es donde menor es el apoyo relativo del reafianzamiento en comparación con su peso en España.
Por comunidades, País Vasco, Castilla y León, Galicia e Illes Balears presentan la mayor diferencia positiva entre su peso relativo en el reafianzamiento y la proporción de empresas en el tejido productivo español. Por el contrario, en Cataluña, Comunidad de Madrid, Comunitat Valenciana y Andalucía es donde menor es el apoyo relativo del reafianzamiento en comparación con su peso en España.
Por sector, las empresas de la industria manufacturera, hostelería y comercio son las que mayor diferencia positiva presentan entre su proporción como receptoras del instrumento de reafianzamiento y su peso en el tejido productivo nacional. Por el contrario, en las empresas de actividades inmobiliarias, construcción y actividades profesionales es donde menor es el apoyo relativo del reafianzamiento en comparación con su peso en España.
De los préstamos reafianzados, el 60 % están destinados a cubrir las necesidades de liquidez de las empresas (circulante) y el 40 % restante a inversión.